
ESO cambia a un modelo de actualización de contenido estacional
Zenimax Online Studios está revolucionando la entrega de contenido de Elder Scrolls Online (ESO), alejándose de sus lanzamientos anuales del Capítulo DLC a un nuevo sistema estacional. Este cambio, anunciado por el director de estudio Matt Firor, presenta temporadas temáticas que duran 3-6 meses, cada una llena de arcos narrativos, eventos, artículos y mazmorras.
Desde su lanzamiento de 2014, ESO ha sufrido una evolución significativa, abordando en particular las críticas iniciales con actualizaciones sustanciales que aumentaron su popularidad. Este último cambio, coincidiendo con el décimo aniversario del juego, tiene como objetivo diversificar el contenido y aumentar la frecuencia de actualización.
El modelo estacional permite contenido más variado durante todo el año, según Firor. Este enfoque permite actualizaciones más ágiles, correcciones de errores y mejoras en el sistema, facilitadas por un equipo de desarrollo reorganizado que utiliza una estructura modular "de lanzamiento: cuando está listo". A diferencia del contenido de temporada temporal en otros juegos, las temporadas de ESO contarán con misiones, historias y ubicaciones persistentes, según lo confirmado por el equipo de ESO en Twitter.
El contenido más frecuente cae
Esta desviación del ciclo anual tradicional fomenta la experimentación y libera recursos para las mejoras del rendimiento, los ajustes de equilibrio y la mejor guía del jugador. El nuevo contenido también se integrará en las áreas de juego existentes, con nuevos territorios lanzados en cuotas más pequeñas y más manejables. Los planes futuros incluyen mejoras visuales (texturas y arte), una actualización de UI de PC y mejoras para el mapa, la interfaz de usuario y los sistemas de tutoriales.
Este pivote estratégico refleja el panorama en evolución de los MMORPG y el compromiso de los jugadores. Al ofrecer nuevas experiencias cada pocos meses, ZenIMax tiene como objetivo mejorar la retención de jugadores en diversos datos demográficos, particularmente crucial a medida que el estudio desarrolla simultáneamente una nueva propiedad intelectual.